• La presencia de la marca CE, la importancia del etiquetado del maquillaje y la precaución con las lentillas de fantasía son parte de las recomendaciones para la próxima celebración de la fiesta de Halloween

  • Desde UCARAGÓN recomendamos la propia confección de los disfraces, tanto por resultar la opción más económica, como por su originalidad y creatividad, así como evitar estereotipos de género

La precaución con maquillajes y lentillas de fantasía son parte de las recomendaciones que desde la Unión de Consumidores de Aragón queremos dar de cara a la celebración de Halloween. Además, desde la asociación nos gustaría recordar que los disfraces infantiles son considerados juguetes y deben cumplir una normativa específica.

La festividad de Halloween vuelve como cada 31 de octubre y, desde hace unos días, las tiendas se han llenado de disfraces y complementos de Halloween para menores y adultos. Por eso, desde UCARAGÓN queremos recordar una serie de consejos de consumo para evitar problemas, principalmente sanitarios.

En este sentido, queremos advertir que los disfraces para los menores de 14 años se consideran juguetes, y por ello deben cumplir con la normativa que los regula. También es muy importante asegurarnos que los trajes, máscaras, maquillajes y lentillas de fantasía, que se han puesto tan de moda, sean seguros. Recordemos que la piel y los ojos son para toda la vida y, por tanto, deben cuidarse.

En UCARAGÓN hemos comprobado que los precios de los disfraces no han variado prácticamente en los últimos años. Los disfraces ya confeccionados son tan asequibles que pocas personas optan por el alquiler o la confección, a pesar de que esta última opción es la más original, la más creativa y la más divertida.

Por ello, y a pesar de la amplia oferta de disfraces confeccionados, desde la Unión de Consumidores de Aragón se recomienda la propia confección de los disfraces, por ser más original, creativa, divertida y económica. También animamos a elegir el disfraz evitando las desigualdades y rompiendo con estereotipos asignados a hombres y mujeres, así como adaptarlos a la edad.

¿Qué debes tener en cuenta a la hora de comprar un disfraz?

  • Los disfraces destinados a menores de catorce años son considerados juguetes y deben cumplir con la normativa específica de estos productos. Es importante tenerlo en cuenta porque máscaras, disfraces y maquillajes de Halloween son productos que aparecen frecuentemente en la red de alerta de AESAN, por no cumplir todos los requisitos de seguridad.
  • En su etiquetado debe indicarse la marca CE, que garantiza que los tejidos tienen un tiempo más lento de combustión; debe indicarse la edad recomendada, especialmente si son destinados a menores de 3 años y, en el caso de que sea necesario, debe incluir las advertencias en su utilización, y los datos de identificación del fabricante o responsable del producto.
  • Los disfraces para adultos deben cumplir el etiquetado de las prendas textiles, indicando nombre, dirección y el NIF del fabricante, comerciante o importador, número de registro industrial en el caso de prendas fabricadas en España y composición del producto.
  • Las máscaras y pelucas han de disponer de aberturas de un tamaño adecuado para evitar riesgos de asfixia. Comprobar los orificios de boca, nariz y ojos. Han de incluir el etiquetado completo, en castellano, y han de estar realizadas con materiales no inflamables.
  • Las lentillas de colores de fantasía se adquieren con gran facilidad a través de Internet, bazares, y otros establecimientos no autorizados, sin que exista «ningún tipo» de garantía sanitaria. El uso de este tipo de lentillas de fantasía puede producir una sensación de sequedad y arenilla en los ojos, enrojecimiento, irritación e, incluso, dolor al retirar la lente. Asimismo, otros riesgos asociados con un uso inadecuado incluyen conjuntivitis, inflamación corneal, reacciones alérgicas, abrasión corneal derivada de una adaptación deficiente y pérdida visual.

Maquillaje: debe estar sometido a controles dermatológicos

Hay que tener especial precaución al adquirir productos cosméticos destinados al maquillaje, sobre todo los que se venden en bazares y tiendas de bajo coste, porque existe el peligro de que estos productos no hayan sido sometidos a los controles dermatológicos adecuados y produzcan alergias y reacciones en la piel, bien porque sean de imitación o falsificados.

Los productos cosméticos a la venta en España deben adecuarse a lo establecido en el Real Decreto 1.599/1997 de 17 de octubre sobre productos cosméticos. Las empresas españolas que fabrican estos productos deben contar con autorización de la Agencia Española del Medicamento.

El etiquetado del maquillaje

Recuerda que el etiquetado del maquillaje que vayas a emplear en tus disfraces debe indicar:

  • Denominación del producto.
  • Nombre o razón social ya la dirección o domicilio social del fabricante o del importador, así como del responsable de la puesta en el mercado.
  • El contenido nominal, salvo para envases de menos de 5 gramos o de menos de 5 mililitros.
  • Fecha de caducidad.
  • Las precauciones de empleo y advertencias de uso.
  • El número de lote de fabricación.
  • El país de origen (en caso de fabricarse fuera de la UE).
  • La función del producto.
  • Lista de ingredientes.

Por último, UCARAGÓN recomienda que se elija el producto teniendo en cuenta la relación calidad-precio, y debe exigir el ticket de compra y conservarlo por si es necesario realizar una reclamación.

 
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