• Se define qué es una «ola de calor epidemiológica»

  • Mayores de 65 años, menores de 5 años, personas con actividades que requieren mucho esfuerzo físico o personas con enfermedades crónicas son grupos de mayor riesgo ante las altas temperaturas

Desde el 16 de mayo de 2025 permanece activo el plan de acción del Gobierno de Aragón para la prevención de los efectos de las altas temperaturas sobre la salud. El Plan del Calor 2025 presenta la novedad respecto a años anteriores de que se define qué es una «ola de calor epidemiológica».

Durante las últimas décadas ha aumentado la preocupación por los efectos del «Cambio Climático» y según los expertos, a lo largo del siglo XXI, se producirán cambios, entre los que cabe destacar los de la subregión mediterránea (que engloba a España, excepto Canarias):

  • Se prevé un incremento de la aridez y de incendios forestales.
  • Se prevé un aumento de las temperaturas extremas, disminución de precipitación y disminución de cobertura de nieve.

Las últimas evidencias científicas refuerzan la idea de que los planes de prevención tienen un efecto real sobre la disminución de la mortalidad asociada a los excesos de temperatura.

Una ola de calor epidemiológica se entiende como aquel episodio en que las temperaturas se asocian con anomalías de mortalidad, con independencia de la duración. Esta definición permite identificar umbrales de riesgo en función del impacto observado en la salud y no exclusivamente en criterios metereológicos, y su principal ventaja radica en su utilidad para las alertas en salud pública.

Este plan de acción planifica una serie de actuaciones dirigidas a prevenir los posibles efectos para la salud de las altas temperaturas en función del nivel de riesgo. Al igual que en 2024, los niveles de riesgo son cuatro (de 0 a 3):

  • 0: Ausencia de riesgo  (color verde)
  • 1: Bajo riesgo (color amarillo)
  • 2: Riesgo medio (color naranja)
  • 3: Alto riesgo (color rojo)

A partir del nivel de riesgo 2 (naranja), desde el Ministerio de Sanidad,  habrá comunicación inmediata y distribución diaria mientras dure la alerta, por vía electrónica y telemática (SMS) a las personas responsables en Aragón, de las previsiones de temperaturas (sistemas de información) y, a su vez, estos responsables comunicarán a los organismos de referencia de la comunidad autónoma.

Las instituciones y organizaciones objeto de actuación serían:

  • Red hospitalaria pública y privada
  • Red de atención primaria, en especial el programa de atención a personas mayores
  • Residencias y centros de día públicos (IASS) y privadas
  • Servicios sociales de base
  • Organizaciones de consumidores
  • Otras organizaciones

Cada año, el intenso calor puede suponer un riesgo para muchas personas, más aún si se une un exceso de humedad. El cuerpo habitualmente se enfría mediante el sudor pero, en algunas condiciones, este mecanismo de defensa no es suficiente. Así, el exceso de calor produce pérdida de líquidos y de sales, que son necesarios para el normal funcionamiento del cuerpo pudiendo aparecer algunas dolencias.

Quiénes tienen riesgo de sufrir problemas por el calor

Todos somos susceptibles de sufrir trastornos ante el exceso de calor aunque hay grupos de personas que presentan mayor riesgo y deben estar especialmente protegidas, como son:

  • Personas mayores de 65 años.
  • Menores de 5 años y sobre todo los bebés.
  • Personas que lleven a cabo una actividad que requiere mucho esfuerzo físico.
  • Personas que presentan enfermedades previas, especialmente las que sufren del corazón o de alta presión sanguínea o problemas intestinales u obesidad.
  • Personas que toman algún tipo de medicación de forma crónica o que consumen una cantidad excesiva de alcohol.

Qué hacer en los días de calor

Proteger el hogar

  • Durante el día, mantener las ventanas y persianas cerradas para proteger la vivienda del calor.
  • Aprovechar para ventilar la casa por la noche, cuando las temperaturas han descendido.
  • El uso de ventiladores puede aliviar hasta cierto punto los efectos del calor, pero no implican un descenso de la temperatura. Para ello, puede ser necesario, en su caso, la utilización de aparatos de refrigeración.

Cuidados personales

  • Beber mucha agua sin esperar a tener sed. Evitar todo tipo de bebidas alcohólicas.
  • Si se está tomando de forma crónica alguna medicación, consultar con el médico/a; recomendará la cantidad de líquido a beber al día de acuerdo a la edad y estado.
  • Evitar las comidas calientes o pesadas. Recordar la dieta tradicional del verano basada en platos fríos, ensaladas y frutas.
  • Usar ropa apropiada: ligera, no apretada, de colores claros y preferentemente de algodón, evitando la ropa sintética. Utilizar sombrero o gorra para protegerse del sol.
  • Usar protección para los rayos solares. Unos 30 minutos antes de salir al sol aplicar crema protectora con Factor de Protección mayor de 15 y repetir la operación a menudo.

Precauciones en las actividades cotidianas

  • No es recomendable realizar actividades que exijan esfuerzo físico importante cuando está haciendo mucho calor. Si es necesario, hay que hidratarse previamente al ejercicio y beber de 2 a 4 vasos de agua fresca cada hora. Ante el cansancio o mareo, es mejor interrumpir la actividad e ir a un lugar fresco o con sombra.
  • Planear las actividades en la mañana o en el atardecer cuando las temperaturas no son tan altas.
  • No dejar a niños/as, personas mayores o animales en coches con las ventanas cerradas.

Cuidar a las personas mayores y niños/as

  • Si se encuentran a nuestro cargo personas mayores, hay que vigilar estrechamente su situación física, animándoles a beber líquidos, aunque no manifiesten sed, supervisando la aparición de algún posible síntoma de deshidratación.
  • Prestar atención a los familiares mayores que viven solos.
  • Cuidar que los niños/as no realicen ejercicios o juegos expuestos al sol en las horas punta de calor.
  • Si se vive sólo/a, tratar de mantener contacto periódico con vecinos/as o familiares.

¿Qué síntomas pueden aparecer por exceso de calor?

El exceso de calor puede ser debido a una exposición muy intensa y corta o a una exposición mantenida, aunque de menos intensidad.

Los primeros indicios del exceso de calor son:

  • calambres
  • irritación de la piel o quemaduras
  • agotamiento
  • temperatura elevada

QUÉ HACER: Buscar refugio en la sombra o en un lugar con aire acondicionado. Tomar una bebida no alcohólica fresca, descansar, tomar un baño o una ducha con agua fresca y ponerse ropa ligera.

Si aparecen síntomas de gravedad  como son:

  • temperatura muy elevada
  • dolor de cabeza
  • vómitos
  • pérdida de consciencia

QUÉ HACER: tratar de conseguir asistencia médica lo antes posible, por los procedimientos habituales (acudir a un servicio de urgencias, teléfonos de emergencia 061 y 112).

 

 

 
HÁZTE SOCIO/A
en este enlace:
https://www.ucaragon.com/producto/cuota-socio/
Llámanos al 976 39 76 02 (Zaragoza y Huesca)
o al 628 824 443 (Teruel)
y despejaremos todas tus dudas